Todas las Asociaciones de Charros de México y de la Unión Americana, tienen una Escritura Pública que les da el carácter de Asociación Civil, formando parte de la Federación Mexicana de Charrería (FMCH); bajo estas condiciones, los cargos administrativos son democráticamente electos por los integrantes de cada Asociación, y bajo estas condiciones, la situación de la Agrupación de Charros Regionales de la Villa se ha venido agravando, ya que Ricardo Mancilla Pérez, en su carácter de Presidente del Consejo Directivo, expulsó indebidamente a su Secretario General Christian Rosemberg Almanza y posteriormente desconoció el dictamen de la Comisión de Honor y Justicia, copia que obra en poder de quien escribe, fechado el 19 de octubre pasado, donde esta Comisión evalúa todos los antecedentes del caso y en el que textualmente dice “1. Este Honorable Comité de Honor y Justicia, es competente para conocer y pronunciarse al respecto a los hechos que le han sido consignados por parte del Comité de Vigilancia y del Presidente de la Agrupación de Charros Regionales de la Villa A.C.”

El dictamen se pronuncia en 14 puntos con 21 anexos, donde aclara perfectamente que “El supuesto inculpado Christian Rosemberg Almanza es un asociado integrante de la Mesa Directiva, quien no tiene ninguna obligación estatutaria de estar realizando tareas fuera de su nombramiento y además no tiene acceso directo al dinero de la Asociación, aclarando que no hay daño patrimonial, por lo tanto resuelve que Rosemberg Almanza no tiene suspendidos sus derechos estatutarios que rigen la vida interna, por lo que se encuentra en goce pleno de ellos. “Notifíquese y Cúmplase”.

Todo pareciera indicar que este caso quedaría concluido con esta amplia resolución, pero fue todo lo contrario, ya que la resolución y la opinión de varios integrantes de esta Agrupación son realmente pisoteadas por el Presidente en turno, ya que él sigue haciendo uso como si esta Asociación Civil fuera de su propiedad, pues continúa en el limbo administrativo, porque no se ha efectuado ninguna auditoría externa que aclare varios desvíos a la que han hecho referencia varios socios, desvíos que en 18 ocasiones ha realizado a un familiar, por la suma de 1 millón 500 mil pesos.

En este caso, si Mancilla Pérez tuviera respeto a su Asociación y tantito sentido común, ya se hubiera separado del cargo para aclarar cualquier duda que se tuviera sobre su desempeño en esta Institución.

Este asunto en el que aún falta un largo trecho por recorrer, tendrá que ser asistido, y en su caso sancionado, por la Unión de Asociaciones de Charros de la Ciudad de México y por la misma FMCH, ya que Rosemberg Almanza es un charro federado con mas de 20 años de antigüedad, sin embargo, Ricardo Mancilla no podrá ser Juez y Parte, pues es integrante de la Comisión de Unión y Justicia de la Unión de Asociaciones Charras Capitalinas, convirtiéndose así en una amenaza real para este Deporte Federado, y por otro lado, la FMCH se ha mantenido al margen a pesar de que esta situación creará una crisis muy seria, porque tengo entendido, que Christian Rosemberg hará valer los recursos procedentes ante las Instancias Legales correspondientes, incluyendo el SAT.