Por Ramón González Barbet

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Es verdaderamente lamentable, incluso hasta ofensivo, ver y comprobar día a día en lo que se ha convertido la Federación Mexicana de Charrería (FMCH) con esta administración de José Antonio Salcedo López, donde se ha institucionalizado el mal uso y el abuso de esta Federación, para que bajo su amparo, durante los 2 años de gestión que lleva, se haya privilegiado el hacer el negocio en cada uno de los eventos oficiales de esta  institución, anteponiendo la entrada del cash, como sucedió en Zacatecas 2022, donde la taquilla, concesiones, patrocinios, áreas comerciales, palcos y venta de lugares para charros y escaramuzas con pase excedente, fue avalada, fomentada y hasta protegida por el Comité Organizador y por el propio Gobierno del Estado.

Esta manera de operar rebasó por mucho las ediciones anteriores de Campeonatos Nacionales, situación que provocó múltiples inconformidades manifestadas únicamente en las redes sociales, pero lo mas lamentable de Zacatecas 2022, es que se perdieron apoyos que ya se habían ganado en años anteriores para la Charrería Federada, poniendo en entredicho el ¿Porque o para que sirve estar federado?, ¿Qué beneficios se alcanzan al federarse?, ¿Cuál es el fin de pertenecer a una federación? Todo parece indicar que esta Institución solo cuida los intereses de un pequeño grupo, donde la categoría “AA” o “Tradicional”, solo es tomada en cuenta en época de elecciones o para que paguen sus respectivas cuotas al federarse, además de las sobre cuotas que les imponen como sucedió en este pasado Campeonato Nacional Zacatecas 2022, ya que ahora, ni siquiera tuvieron la oportunidad de clasificarse y obtener con ello el reconocimiento y la premiación correspondiente, en igualdad de circunstancias a la categoría “AAA” o “Alto Rendimiento”, aunque a decir verdad, una vez más la premiación dejo mucho de que hablar con sus estatuillas, hebillas y reconocimientos, hasta eso ya se perdió, como olvidar aquellos tiempos de administraciones pasadas donde se disputaban jugosos premios en efectivo, incluso autos y camionetas.

Por todo lo anteriormente expresado, me veo obligado a hacer una reflexión con los Escuadrones y Escaramuzas que pagaron sus respectivos 30 mil y 15 mil pesos para obtener su pase excedente, ¿Cuántos de ellos lograron pasar a la etapa de Cuartos de Final?, ¿Cuántos de ellos recibieron un reconocimiento o agradecimiento por haber participado y realizado su aportación en beneficio de otros? Me queda claro que es muy grande el entusiasmo de la charrería por participar en un Campeonato Nacional, pero justo sería que dentro del evento anual más grande de esta disciplina tuvieran un campeonato acorde a su categoría “AA”, fueran premiados de manera equitativa y que no únicamente sean utilizados. ¡Bendita charrería que aguanta todo!

Aunque las redes sociales son testigo fiel de los muchos comentarios en contra del actuar de Salcedo López, la verdad es que no hay quien se manifieste abiertamente en contra de estos abusos, pero lo mas grave, es que a pesar de haberse mostrado públicamente el poco interés de fomentar y respetar a nuestro Deporte Nacional, nadie alzó la voz, ni se indignó y quizá ni siquiera se dieron cuenta del atropello realizado en charros, escaramuzas, público asistente, artesanos y comerciantes, siendo un reflejo encaminado a normalizar la aberración deportiva y estatutaria de la FMCH, pero la cereza en el pastel, fue el haber cobrado la participación de 15 mil pesos para escuadrones charros, 5 mil para escaramuzas y 7 mil para charros completos, en el pasado “XXIX Campeonato Nacional Charro Mayor”, con sede en Rancho El Pitayo, de Querétaro, casa del Presidente Nacional.

Este es un trato ofensivo, humillante y discriminatorio, incluyendo la premiación del evento, que nos muestra una vez mas que Toño Salcedo, quien con su famosito dicho “La charrería no es un gasto, es un gusto”, se pasa por el arco del triunfo los esfuerzos de tanta gente y de tantos Ex Presidentes, quienes trabajaron arduamente para obtener logros para la Charrería Federada.